Con absoluta discreción el reconocido artista italiano Angelo Musco vino a Buenos Aires para hacer una sesión de fotos en el Palacio Duhau – Park Hyatt Buenos Aires. Allí a puertas cerradas, tomó fotos de 33 modelos desnudos que siguieron paso a paso sus indicaciones. Las piezas formarán parte de una gran obra que se llamará Génesis. Se tratará de una ciudad surrealista, quizás dorada en la que habrá varias torres y puentes formados por imágenes de cuerpo. “Tengo cada arco, cada curva en mi cabeza. Necesito miles de tomas porque van a ser 15 o 20 fotos las seleccionadas y cada centímetro está hecho de piel. Te podés imaginar la cantidad de trabajo que es. Llevará dos años terminar el proyecto”, me contó Angelo en La Bibliothèque del Palacio Duhau.
¿Por qué elegiste venir a la Argentina?
Comencé a desarrollar este proyecto hace unos meses. Se trata de una sección del Génesis que es la confusión de las lenguas, y esa sección describe la construcción de la Torre de Babilonia. Quise crear mis propias ciudades con muchas torres. Y quise usar diferentes culturas e idiomas. Entonces comencé este proyecto en Nueva York, y de allí sigue Londres, Alemania, Holanda y Bélgica. Quise que Buenos Aires representara Sudamérica, y conocí a Matías Kritz que me lo facilitó. Gracias a él pudimos hacerlo. Gracias a él y a Jorge Martorell. Fue un proceso largo y complicado pero alucinante. Hoy fue la sesión de fotos. Tuvimos 33 modelos. Hicimos todas las posiciones, los arcos , las curvas. Hay muchas torres. Tengo todo en mi cabeza.
¿Cuánto hace que estás trabajando en este proyecto?
Comencé en junio pasado. Hace casi un año. Pero necesito otro año.
El resultado va a ser…
Angelo Musco crea sus imágenes con collages que son todo menos simples. Su trabajo anterior fue un bosque muy complejo realizado por miles de fotos que tomó de árboles en México, California, Nueva York y ciudades de Asia. Luego en un montaje las compone, como si las cosiera. “Una vez que la arquitectura está lista, empiezo a trabajar con colores y tonos. Tengo una idea clara en mi mente, pero a veces hay variaciones en el proceso. Cuando la gente me pregunta qué siento cuando veo mi trabajo les digo que no es solo una emoción. Es como leer un diario de dos años de tu vida“.
Estás involucrado con cada etapa del proceso, pero tenés asistentes. Existe esta discusión en el arte contemporáneo acerca de los artistas que trabajan con asistentes. ¿Qué pensás de eso?
¡Gracias a Dios por los asistentes! de otra forma mi trabajo estaría listo cada 10 años. Sería imposible. En mi estudio estoy sentado entre ellos dos, con un ojo en cada computadora. Tener asistentes es completamente coherente con mi trabajo. Queremos celebrar la comunidad, sin gente no podría construir mis paisajes. La misma regla se aplica a mi estudio. Sería imposible que yo trabajara solo por varias razones. Primero por los tiempos, luego el mercado no sostendría mi trabajo, porque si produzco una obra cada diez años, la inversión no lo vale. Y en tercer lugar, trabajar en equipo es fascinante. Yo tengo seis brazos. Estoy completamante abierto a sus sugerencias, crecemos juntos, aprendemos cosas juntos pero con mi visión de la idea.
¿Por qué trabajás en Nueva York y no en Italia?
Si querés impulsar tu trabajo a un nivel internacional tenés que ir a Nueva York. Los costos de lo que yo hago son muy altos, Nueva York es una ciudad internacional donde podés encontrar sponsors. Es una isla en sí misma, un área neutral. Hay una gran competencia, un empuje, y calidad. Trabajás más y crecés.
Inés Viturro del medio digital picsdearte.com/