El rabino Eliezer Berland abrió su primer grupo de estudios religiosos en 1978 con el nombre de “Shuvu Banim”. Berland ejercía una influencia muy fuerte en sus seguidores, al punto que en la década de los 80, creó violentos grupos encargados de la vigilancia de la moralidad judía. Los miembros de Shuvu Banim que aparentemente se descarriaban eran sometidos por las llamadas “patrullas de la modestia”.
Una noche de 1986, el joven estudiante del grupo de 17 años, Nissim Shitrit desapareció en Jerusalén, fue visto por última vez en el área cercana al centro de estudios. 4 meses antes, había sido golpeado violentamente por miembros de una patrulla porque había salido con varias chicas. 4 años después, Avi Edri de 41 años quien también había formado parte del culto, fue encontrado muerto en un bosque de Jerusalén. Su cadáver presentaba indicios de haber sido golpeado y luego abandonado.
Ambos crímenes quedaron sin ser resueltos, pero la sospecha de que el culto Shuvu Banim había tenido que ver, siempre se mantuvo en el aire. Las décadas pasaron y Eliezer Berland fue envolviéndose en más polémicas, siendo sentenciado a 18 meses de prisión por abusar sexualmente de mujeres jóvenes. En 2021 fue nuevamente sentenciado al mismo tiempo por fraude, evasión fiscal y lavado de dinero.
Mientras cumplía su nueva condena fue imputado en los homicidios perpetrados por la secta años atrás, como el aparente autor intelectual. Berland manifestó no serlo y tampoco estar presente en el momento de los crímenes, a pesar de ser mencionado varias veces por algunos acusados. Pero a falta de pruebas concretas no fue acusado formalmente y al día de hoy se encuentra en libertad, aunque continúa siendo investigado por las autoridades israelíes.