Por JOREM: Terribles Crímenes y Fraudes Una de las principales cartas de presentación del pseudo gurú Sai Baba, eran las supuestas materializaciones que terminaban maravillando a sus devotos. Sin embargo, críticos y escépticos han argumentado que muchas de estas demostraciones podrían explicarse fácilmente, ya que se tratarían de evidentes técnicas de ilusionismo.
A pesar de las iniciales buenas acciones de Sai Baba con sus seguidores, tras bastidores, su comportamiento pasaría a ser completamente aberrante. Cuando, con la excusa de reuniones privadas con varios devotos varones para curarlos de alguna aparente enfermedad que él les había detectado convenientemente, aprovechaba para palparles sus zonas íntimas. Realmente la cifra total de estas historias, es escandalosa.
Al parecer, Sai Baba tenía una terrible predilección por los jóvenes devotos varones, pero una vez que estos seguidores crecían, Sai Baba les encomendaba misiones muy lejos de él. Adicionalmente en esos momentos nefastos, el pseudo gurú solía recordarles que esas acciones lamentables que les estaba haciendo también eran parte de su karma.
Fue a raíz de esa gran cantidad de denuncias que muchos recordaron un extraño episodio suscitado el 6 de junio de 1993. Cuando 4 devotos varones de Sai Baba entraron en la residencia del pseudo gurú en Puttapharti bajo la excusa de darle un telegrama. Cuando su camino fue obstruido por varios asistentes de Baba, los sujetos usaron objetos cortopunzantes y eliminaron a 2 de los asistentes del gurú.
Al escuchar la conmoción, Sai Baba tocó una alarma especial que tenía en su habitación, así que inmediatamente la policía que solía custodiar el sitio, se acercó a su residencia. Rápidamente usaron sus armas de fuego y eliminaron a esos 4 devotos de Baba.
Muchos aspectos del incidente quedaron sin resolverse y otros resultan muy ambiguos, lo cierto es que el propio Sai Baba impidió que se realizaran investigaciones profundas sobre el hecho.