Por JOREM: El fundador del movimiento, Swami Prabhupada se casó con una menor de 11 años cuando este tenía 21, aquel matrimonio fue arreglado por los padres de la pareja. Con los años mencionaría que las mujeres eran menos inteligentes que los hombres, criticaba varios ideales de la sociedad moderna y hablaba ofensivamente de ciertos grupos, como los judíos y los afroamericano. Además estaba en contra de la democracia y elogiaba a los gobiernos dictatoriales.
Prabhupada también mencionó que los niños debían ser educados por medio del amor, y que el amor más grande es no ser blando y exigir el cumplimiento de las reglas. Esa declaración, abierta a una infinidad de interpretaciones, además de todas sus posturas misóginas, ocasionarían graves consecuencias en el futuro del movimiento.
Uno de sus discípulos sucesores, un sujeto llamado Kirtanananda, creó una comunidad Hare Krishna en West Virginia, Estados Unidos. Con el tiempo radicalizaría a sus seguidores, se aprovecharía de los menores de la comunidad y generaría grandes cantidades de dinero ilegalmente, contrabandeando y explotando a sus seguidoras.
Por si no fuera poco, ordenó la ejecución de dos seguidores rebeldes.
Lamentablemente, Kirtanananda no pagó apropiadamente sus crímenes y murió en 2011.
En Sudamérica también se han suscitado controversias. En el año 2016, la joven Nathaly Rikeros se autoeliminó saltando desde la azotea del hotel Sheraton en Perú. Algunos especulan que las enseñanzas que recibió del grupo, pudieron haber influenciado su triste decisión. Por otra parte, el pseudo gurú, Paramadvaiti Swami ha sido acusado en Perú, Colombia y Ecuador, por aprovecharse de algunas mujeres de su supuesto grupo religioso.