El magnate Elon Musk, dueño de Tesla Motors y SpaceX, volvió a quedar en el centro de la atención mediática tras compartir sus opiniones sobre su hija transgénero y lo que él denomina el virus «woke», criticando fervientemente las ideas progresistas que defienden los derechos de minorías, entre ellas la comunidad LGBTQ+ y abriendo una especie de frente de batalla cultural contra esas ideas.
En una reveladora entrevista con el médico estadounidense Jordan Peterson, el multimillonario abordó temas íntimos de su entorno relacionados con la identidad de género y su familia, marcada por la transición de género de uno de sus doce hijos, actualmente llamada Vivian.
«Mi hijo Xavier fue asesinado por el virus woke. Por esa razón me comprometí a destruirlo», dijo Musk. Con sus declaraciones, el dueño de X revolucionó las redes sociales con comentarios a favor y en contra de su postura que excede la corrección política.
Elon Musk desató la polémica por sus dichos sobre su hija trans
El magnate empresario reveló que su hijo mayor, anteriormente conocido como Xavier Musk y ahora identificada como Vivian Jenna Wilson tras una transición de género, fue el centro de un conflicto «personal y filosófico» para él. En esa línea, expresó su profundo desacuerdo con los tratamientos médicos que se le administraron a su hijo durante su proceso de transición, especialmente los bloqueadores de la pubertad, que Musk considera como «medicamentos de esterilización«.
«Me engañaron para que le diera bloqueadores de la pubertad a mi hijo. Estos son medicamentos de esterilización. Mi hijo Xavier está muerto. Asesinado por el virus woke. Ésta es la razón por la que prometí destruir el virus woke», declaró Musk en un video que se volvió viral en redes sociales.
Según su relato, Musk argumentó que fue persuadido bajo «circunstancias confusas» durante la pandemia de Covid-19 para autorizar este procedimiento, afirmando que se le advirtió que su hijo podría estar en riesgo de suicidio si no accedía a las demandas médicas. En la entrevista, Musk y Peterson coincidieron en su creencia de que aquellos que promueven y administran tratamientos médicos de reasignación de género deberían enfrentar consecuencias legales severas.
A esto sumó que tanto él como su familia están radicados en California, Estados Unidos, una jurisdicción donde estos tratamientos son legales. Esta experiencia, según Musk, lo llevó a cuestionar profundamente los valores y las presiones culturales que rodean a la identidad de género y la influencia del movimiento «woke».
Qué es el «virus woke» que Elon Musk quiere combatir
El término «woke«, que se refiere a un movimiento social que promueve la conciencia social y la justicia social, fue duramente criticado por Musk y otros por su influencia en la política y la cultura contemporánea. Originariamente, el término nació de la comunidad negra en Estados Unidos para resaltar las injusticias sociales en torno al racismo, por lo que no tiene una connotación peyorativa sino que ésta depende del contexto y de quién lo use.
En la actualidad, el término «woke» a menudo se usa de manera peyorativa para criticar ciertas ideologías o movimientos percibidos como excesivamente progresistas, tal como hizo Elon Musk u otras figuras como el presidente Javier Milei. Ideas que según esta interpretación pueden resultar políticamente correctos o moralmente autoritarios. En tanto, se utiliza para denunciar lo que algunos consideran una sobre-sensibilidad o una exagerada corrección política en temas de justicia social, identidad de género, diversidad racial, entre otros.
Con respecto a las declaraciones del influyente empresario, el caso de su hija Vivian Jenna Wilson, quien tramitó el cambio de apellido para alejarse formalmente de su padre biológico, abrió el debate público sobre los derechos de las minorías y las libertades individuales respecto a la identidad de género y la orientación sexual. © Perfil.