Como si esto fuera poco, la madre de Sabrina forma parte de uno de los principales grupos de riesgo debido a que tiene ochenta años.
Al ver el revuelo que se armó, la actriz escribió un descargo: “Para todas las personas que me preguntaron por el cumpleaños de mi mamá, quiero contarles que se hizo en Mendoza. Hasta ese momento estaban habilitadas las fiestas privadas con menos de 200 personas. Nosotros eramos 78”.
«Ninguno de los invitados había viajado al exterior en los últimos meses. Todas las condiciones estuvieron dadas para poder realizarla. De lo contrario, por supuesto que se hubiese pospuesto. Distinto es ahora que al suspender las clases yo tuve que suspender el cumpleaños de mi hijo (era el viernes). Las cosas cambian día a día y hay que adaptarse por el bien de todos”, agregó. Fuente: Revista Pronto.