Terrifier 2 se estrenó en algunas salas del país el pasado 6 de octubre y desde entonces se han vivido desmayos, vómitos, llamadas a los servicios de emergencia y salidas en sillas de ruedas. Al parecer, las secuencias violentas perpetradas por su asesino protagonista son tan extremas -un payaso con dientes que literalmente chorrean sangre- que algunos espectadores la están padeciendo en sus propias carnes. “Mi amigo se desmayó y el cine llamó a una ambulancia” escribió un usuario de Twitter tras verla. Otro describió que “el hombre en la butaca de atrás se desmayó y se golpeó con mi silla, otro se marchó porque no se sentía bien, lo escuché decirlo y al salir de la puerta del cine lo oí vomitando fuerte en el baño”. Si buscamos en redes sociales podemos encontrar decenas de comentarios similares, con espectadores que incluso aplauden el gore de la película pero que aseguran que no pudieron soportarlo.
Incluso publicaron fotografías de los servicios de emergencia, dentro y fuera, de los cines tras pedirles ayuda. Y según otro usuario, algunos medios locales están anunciando que ciertas salas estarían entregando bolsas para aquellos que sientan la necesidad de vomitar durante la proyección.
Sin embargo, semejante reacción, ¿es culpa de la película? No… No del todo. Si tenemos en cuenta el título (que traduciríamos como Aterrador 2), su argumento y que se trata de la secuela de una cinta sangrienta de 2016, podríamos señalar a los mismos espectadores y aplicar ese refrán que dice: ‘la curiosidad mató al gato’. Porque en este caso, si sabes de qué se trata y has visto la primera parte, estás más que avisado de lo que estás a punto de ver.
Entre el interés habitual que genera el cine de terror, sobre todo en el mes de Halloween, y el hecho de que la película está generando conversación precisamente por los estragos físicos que provoca, su taquilla ha ido en aumento. Mientras la mayoría de películas suelen sufrir un declive económico a partir de la segunda semana en salas, en este caso está siendo al revés. Terrifier 2 es una producción pequeña dentro del universo cinematográfico comercial, con un presupuesto diminuto frente a sus competidoras de $250.000. Se estrenó el 6 de octubre en unas pocas salas, 886 para ser exactos, cuando blockbusteres como Halloween: el final lo hizo en 3.901 en EE. UU. Terrifier 2 recaudó $805.000 en primeros días en cartelera y dos semanas más tarde lo ha triplicado con una recaudación que supera los $2.475.000 (Cifras: The-Numbers).
No estamos hablando de un taquillazo, evidentemente, pero sí de una película que no solo ha recuperado lo invertido sino que está generando ganancias millonarias para sus implicados. Estos datos podrían explicar las reacciones que se están viviendo en algunos cines, ya que podríamos analizar si muchos de esos espectadores han ido a verla motivados por la repercusión. Pero si van a verla sin saber de qué se trata o haber visto la primera, entonces aténganse a las consecuencias.
La primera entrega de Terrifier se estrenó de manera doméstica y casi de forma silenciosa para el gran público hace seis años, siendo más conocida por los amantes del slasher. La película en sí relata un argumento básico, sin ninguna profundidad narrativa, social o moral ni nada que se le parezca, al contar la matanza que un payaso maníaco que se comunica a través de la mima llamado Art (interpretado por David Howard Thornton) realiza en una noche de Halloween. Muerte tras muerte, y a cual más violenta, con mucha sangre de por medio. No hay más. Al final de la historia resucitaba de entre los muertos gracias a una fuerza demoníaca y ahora regresa, en la secuela, para continuar con la masacre en otra noche de Halloween. Y si bien en esta ocasión han incluido a una figura femenina como potencial heroína y a una pareja de hermanos como protagonistas, muchas críticas celebran el slaher pero repiten la carencia argumental a favor de la sangre y violencia (RottenTomatoes).
La primera película contaba con secuencias extremas, sobre todo una que mostraba gráficamente el asesinato de una mujer desnuda, cortándola con una sierra desde sus partes íntimas. Y teniendo en cuenta las reacciones que se están viviendo en EE. UU. me temo que la secuela podría ser peor en cuanto a violencia gráfica. Pero, en mi caso, ya estoy avisada. He visto la primera. Fui testigo de su vacío narrativo y sed de complacer al cine sangriento sin motivación inteligente, por lo tanto, es probable que me mantenga lejos de la segunda. Pero si no sabes de qué se trata y no te gusta el cine gore, evidentemente puedes pasarlo muy mal.
Incluso el mismo director, Damien Leone, lo ha comentado. “Me hubiera encantado tener un par de salidas [del cine], creo que es una especie de insignia de honor porque es una película intensa” dijo a EW. “No quiero que la gente se desmaye, se lastime durante la película. Pero es surrealista”. Mientras advierte: “Se titula Terrifier 2, probablemente deberían ver Terrifier 1 antes de ver esta. Si ven Terrifier 1 sabrán en lo que se están metiendo”. A continuación destaca la secuencia que les describí previamente del asesinato con la sierra y asegura que ha intentado rivalizar con ella en esta secuela en honor a los fans de la primera. Que, al final, hizo la secuela para el tipo de público que aprobó la cinta original. Así que tengan en cuenta: no es para todo el mundo.
La primera entrega la pueden encontrar en Filmin, donde está disponible hasta el próximo 30 de octubre. Mientras tanto, es probable que la segunda aterrice en alguna plataforma o servicio de alquiler online próximamente. © Yahoo