Durante el desempeño de su oficio ejecutó a 514 personas.
Giovanni Battista Bugatti fue el verdugo de los Estados Pontificios desde 1796 hasta 1865, cuando se jubiló a los ochenta y cinco años, concediéndole el Papa Pío IX una pensión de treinta escudos.
También llamado maestro di Giustizia, del que deriva su apodo Mastro Titta.
Giovanni Battista Bugatti, a quien le decían Mastro Titta, fue verdugo a las órdenes de los Papas, pues él vio pasar a unos cuantos, durante sesenta y nueve años, entre los siglos XVIII y XIX, período fructífero porque los sumos pontìfices y los tribunales eclesiásticos enviaban a la muerte con constancia.
Estas son la túnica y el hacha de Giovanni Bugatti, que se pueden ver en el Museo de Criminología de Roma.