Este es el cráneo de «Donna del Caviglione» (Mujer de la cueva de Caviglione), encontrado en el entierro del Paleolítico tardío de la Cueva Caviglione (Balzi Rossi), Italia.
Su esqueleto fue desenterrado en 1872 por el arqueólogo Emile Rivière.
La peculiaridad de su cráneo es que está completamente cubierto por pequeñas conchas marinas y dientes de ciervo.
Este hermoso tocado funerario sugiere que la gente de esta época podría haber creído en la vida después de la muerte.
El arqueólogo Emile Rivière fue quien desenterró este esqueleto del Paleolítico Superior. Pero, ¿qué hace que este hallazgo sea tan especial? La peculiaridad de su cráneo. Está completamente cubierto por pequeñas conchas marinas y dientes de ciervo rojo. Esta impresionante pieza funeraria no es solo un testimonio de las habilidades artísticas de la época, sino también una ventana a las creencias espirituales de nuestros antepasados.
El Portal planeta curioso.art explica que la presencia de estas conchas y dientes sugiere que las personas de esa era podrían haber creído en la vida después de la muerte. Tal vez, para ellos, estos adornos servían como un puente entre el mundo terrenal y el más allá. O quizás, estos elementos tenían un significado simbólico, representando la protección, el estatus o la identidad de la difunta.
Aunque no podemos estar seguros de las intenciones exactas detrás de este ornamento, lo que sí sabemos es que la «Donna del Caviglione» es un recordatorio de la rica tapeza cultural y espiritual de nuestros ancestros. Es una prueba de que, incluso en la prehistoria, los humanos buscaban respuestas a las grandes preguntas de la vida y la muerte.