La profesora de matemáticas Mary Stauffer y su hija Beth fueron secuestradas y lograron escapar tras 53 días encerradas en un clóset. Mary fue secuestrada a punta de pistola con su hija de 8 años en 1980 por Ming Sen Shiue, quien había sido estudiante suyo 15 años antes. Mary había sido profesora de su secuestrador cuando él estaba en noveno grado y Ming quería vengarse de ella por haberle dado una ‘B’ en su clase. “Era muy inteligente, un estudiante muy capaz”, dijo Mary a PEOPLE. “Era un típico chico de noveno grado”.
En aquel entonces Mary tenía 36 años y Ming 29. Su antiguo estudiante la violó varias veces durante su secuestro. El estudiante se obsesionó con ella y comenzó a perseguirla, intentando secuestrarla cuatro veces antes de lograrlo, sin que ella sospechara nada. Mary y su hija Beth vivirían una pesadilla en la casa de Ming en Minessotta, donde él las mantuvo encadenadas por casi dos meses dentro de un diminuto clóset.
El hombre también asesinó a un niño de 6 años que fue testigo del secuestro. Ming abusaba sexualmente de Mary mientras la grababa. La amenazaba con hacerle daño a su hija si no lo obedecía. El hombre las amenazaba con matarlas a ellas y al resto de su familia si intentaban huir. “Cada día nos preguntábamos si ese sería nuestro último día de vida”, contó Mary. “No teníamos ninguna seguridad de salir de ahí vivas”.
Su historia será contada en la película Abducted: The Mary Stauffer Story, que estrena en Lifetime en octubre con la actriz Alyson Hannigan en el papel de Mary. “Hay mucha gente que ha pasado por cosas muy terribles, muchas mujeres que han sido violadas”, dijo Mary a PEOPLE. “Ellos tienen que ver que hay vida después de esto”. Lo que espera es ser una luz de esperanza para otros sobrevivientes de abuso y traumas.
Ming argumentó a las autoridades que la profesora le había arruinado la vida al darle una B en matemática, pues eso le había costado una beca universitaria y se había visto forzado a pelear en la guerra de Vietnam, donde se convirtió en prisionero de guerra.
Sin embargo todo esto era una gran mentira. Ming fue a la Universidad de Minnesota, nunca peleó en Vietnam y tuvo una vida exitosa como dueño de un negocio de electrónicos.
Mary se aferró a su fe cristiana, contándole a su hija historias bíblicas de supervivencia para mantener el optimismo de la niña y que sufriera menos emocionalmente. En su día 53 como prisioneras, mientras Ming estaba trabajando Mary notó que había un cable conectándola con su hija Beth y que ese cable estaba asegurado por un pasador de la bisagra de la puerta del clóset. Si ella podía sacar ese pasador de la bisagra, podría salir libre junto a su hija. Al intentar sacarlo, se sorprendió de lo fácil que salió, como si estuviera engrasado.
Mary entonces pudo llamar a la policía y contarles todo. Tras ser rescatadas por la policía, arrestaron a Ming en su trabajo. Durante su juicio, Ming pudo entrar un cuchillo escondido a la sala y atacó a Mary mientras testificaba en su contra, cortándole la cara. La herida requirió 62 puntos para cerrar. El hombre fue hallado culpable del secuestro de Mary y Beth y del asesinato del niño que fue testigo. Un juez lo sentenció a pasar el resto de sus días en prisión. © peopleenespanol.com