Christina Marie Riggs dijo: “Los amo, mis bebés”. Luego, los mató

Por May Roca Nava. “Los amo, mis bebés”. Fueron las últimas palabras de Christina Marie Riggs, ejecutada en 2000 por el asesinato de sus 2 hijos, Justin, de 5 años, y Shelby, de 2 años.
Después de un ataque de depresión, Riggs había planeado sedar a cada niño e inyectarles un dosis letal de productos químicos antes de suicidarse.
Sin embargo, después de ver el terrible dolor que Justin sufría por el químico diluido incorrectamente, eventualmente asfixió a ambos niños, los acostó en su cama y los cubrió con una manta.
Luego tomó 28 pastillas antidepresivas y se inyectó la solución.
Fue descubierta 19 horas después, inconsciente pero aún viva. A pesar de alegar locura, Riggs fue condenada por 2 cargos de asesinato en primer grado en 1998 y se negó a defenderse durante la fase de pena de su juicio.
Irónicamente, fue ejecutada con una inyección letal de cloruro de potasio, la misma sustancia con la que había intentado matar a sus hijos.